sábado, 16 de marzo de 2013

SAGRADA

EUCLIDES

(325-265 aC.) Fue el primero en resumir en detalle los axiomas y teoremas de esta fascinante materia.
Todo lo que este sabio griego escribió acerca de la geometría plana, en su obra "Elementos" sigue siendo absolutamente valido y no ha sido corregido en dos mil años.

¿Que otro tipo de geometría, quizás mas secreto o sagrado,
podría haber sobrevivido escondido en la forma de los edificios o en el trabajo de la naturaleza?


Por supuesto, no toda geometría es sagrada.
Esta disciplina era considerada como un elemento útil para emplazar y construir edificios que resultaran adecuados para las personas que lo fueran habitar.
Cuando agradaba a los dioses se convertía en "sagrada".
Un templo por ejemplo puede ser sagrado si ha sido construido con unas determinadas proporciones
y esta orientado en una dirección concreta.
Esta preocupación por las proporciones y la dirección es tan universal, y se encuentra en tantas culturas
que necesariamente debe reflejar una realidad.
En este libro me propongo buscar aquellas medidas especificas que son sagradas porque ayudan a consagrar o hacer sacros los edificios: desde los círculos megalíticos de la Edad del Hierro, pasando por los templos griegos y egipcios y las catedrales renacentistas, hasta las mas modernas construcciones orgánicas.



¿Por que decimos que la geometría es sagrada?

De igual modo que los números eran sagrados para los pitagóricos  así la geometría lo era para todos los antiguos griegos, pues se trataba de la forma mas concreta, y sin embargo mas abstracta, de razonamiento.

Como veremos la geometría es el modo arquetipico de realizar patrones de muchas cosas; incluso quizás todas las cosas, ya sean empíricas (aquellas cuya experiencia puede sentirse pero no probarse), conceptuales, matemáticas, naturales o arquitectónicas.

Casi todos los pueblos antiguos crearon sus templos y espacios sagrados siguiendo de forma meticulosa los números  la geometría y las proporciones correctas.
LOS MENHIRES DE CALLANISH, EN LA ISLA DE ESCOCIA
DATAN DE 1800 aC. Y ESTÁN DENTRO DE LAS PRIMERAS PIEDRAS QUE MIDIÓ ALEXANDER THOM.


La geometría rige el movimiento mismo de los cuerpos celestes y las estaciones.

La geometría, en su forma mas pura y simple, es sagrada.

Sin embargo esta basada en la geometría ordinaria y en las formas geométricas de Euclides (círculos, triángulos,  cuadrados), así como en las proporciones y la armonía.
Al igual  que el crecimiento se expresa mediante la repetición de patrones, el arte y el virtuosismo en arquitectura se expresan mediante la armonía, que no es otra cosa que la repetición de las mismas proporciones.

Las partes de un todo ni siquiera necesitan estar en la misma proporción  sino que puede ser un armónico de dicha proporción.
Las proporciones sagradas están regidas por determinados números como phi , llamado también razón o "proporción áurea" que aparecen una y otra vez en las obras de los antiguos griegos y en los arquitectos góticos de la Edad Media, así como en el crecimiento de los seres vivos.

A través de estos números la geometría sagrada de los seres vivos y las perspectivas del arte y la arquitectura coinciden.

Extracto del libro:
"Geometría Sagrada "
Autor: Stephen Skinner.

EL JARDINERO




El servidor: —¡Oh, Reina, ten piedad de tu servidor!
La Reina: —Terminó ya la asamblea, y todos mis servidores se han ido. ¿Por qué vienes tan tarde?
El servidor: —Mi hora llega cuando la de los demás ha pasado. Dime qué trabajo ordenas al último de tus servidores.
La Reina: —¿Qué puedo ordenarte, si es tan tarde
El servidor: —Hazme jardinero de tu jardín.
La Reina: —¿Qué locura es ésta?
El servidor: —Renunciaré a cualquier otra tarea, abandonaré al polvo mis lanzas y mis espadas. No me envíes a lejanas cortes. No me pidas nuevas conquistas: hazme jardinero de tu jardín.
La Reina: —¿Y en qué consistirá tu servicio?
El servidor: —En llenar tus ocios. Conservaré fresca la hierba del sendero por donde vas cada mañana y donde, a cada paso tuyo, las flores deseosas de morir bendicen el pie que las pisa. Te meceré entre las ramas del septaparna mientras la luna, apenas levantada en la noche, intentará besar tu vestido a través de las hojas. Llenaré con aceite perfumado la lámpara que arde junto a tu lecho y adornaré tu escabel con maravillosas pinturas de azafrán y sándalo.
La Reina: —¿Y cuál será tu recompensa?
El servidor: —Que me des permiso para tener entre mis manos tus pequeños puños, que parecen capullos de loto, y para rodear tus brazos con cadenas de flores; que pueda teñir las plantas de tus pies con el zumo encarnado de los pétalos de ashoka, y recoger, con un beso, la mota de polvo que pueda posarse en ellos.
La Reina: —Tus ruegos han sido escuchados.
Serás el jardinero de mi jardín.
R. TAGORE


RABRINDANATH TAGORE


RABRINDANATH TAGORE




Poeta, filosofo y pintor indio nacido en Calcuta en 1861.
Hijo de un líder Brahmo Samaj, fue el menor de catorce hermanos. Recibió la educación básica en casa donde existió un gran ambiente intelectual.
A los diecisiete años fue enviado a Inglaterra para completar su educación  sin embargo, interrumpió los estudios cuando asistía a University College de Londres y regreso a su país para matricularse en escuela experimental en Shantiniketan. La primera parte de su obra esta contenida en "Carta de un viajero en Europa" 1881,"Canciones del atardecer" 1882 y "El despertar de la fuente" 1882. Después de su matrimonio en 1883, continuo su larga carrera literaria, destacándose especialmente como poeta, con obras como "Gitanjali" 1912, "El Jardinero" 1913, "Luna Creciente" 1923, "Punashcha" 1932, "Shes Saptak" 1935, y "Patraput" 1936.
En 1912 regreso a Londres, en 1913 recibió el Premio Nobel de Literatura y en 1915 fue nombrado Caballero por el Rey Jorge V.
Falleció el 7 de agosto de 1941.


Los 14 preceptos de Thich Nhat Hanh





No seas idólatra ni te ates a ninguna doctrina, teoría o ideología, incluso a las Buddhistas. Todos los sistemas de pensamiento son medios de guía; no son la verdad absoluta.
No creas que el conocimiento que tienes en este momento es la verdad inmutable, absoluta. Evita ser de mentalidad estrecha y atarte a los puntos de vista presentes. Aprende y practica el desapego de los puntos de vista para estar abierto a recibir los puntos de vista de los demás. La verdad se encuentra en la vida y no meramente en el conocimiento conceptual. Prepárate para aprender a través de toda la vida y a observar la realidad en ti mismo y en el mundo en todo momento.
No fuerces a los demás, ni siquiera a los niños, por ningún medio en absoluto, a adoptar tus puntos de vista, ya sea por autoridad, amenaza, dinero, propaganda o incluso educación. Sin embargo, por medio del diálogo compasivo, ayuda a los demás a renunciar al fanatismo y la estrechez.
No evites el contacto con el sufrimiento ni cierres tus ojos ante el sufrimiento. No pierdas la conciencia de la existencia del sufrimiento en la vida del mundo. Encuentra maneras para estar con aquellos que están sufriendo por todos los medios, incluyendo el contacto personal y las visitas, imágenes, sonido. Por tales medios, despierta tú mismo y a los demás a la realidad del sufrimiento en el mundo.
No acumules riqueza mientras millones están hambrientos. No tomes como el objetivo de tu vida a la fama, el provecho, la riqueza o el placer sensual. Vive simplemente y comparte el tiempo, la energía y los recursos materiales con quienes están en necesidad.
No mantengas ira u odio. Tan pronto como surgen la ira y el odio, practica la meditación sobre la compasión para comprender profundamente a las personas que han causado ira y odio. Aprende a ver a los otros seres con los ojos de la compasión.
No te pierdas en la dispersión y en el ambiente que te rodea. Aprende a practicar la respiración para recuperar la compostura del cuerpo y la mente, para practicar la atención, y para desarrollar la concentración y la comprensión.
No pronuncies palabras que puedan crear discordia y causar ruptura en la comunidad. Haz todos los esfuerzos para reconciliar y resolver todos los conflictos, aunque sean pequeños.
No digas cosas falsas por el bien del interés personal o para impresionar a las personas. No pronuncies palabras que causen desviación y odio. No difundas noticias que no sabes si son ciertas.
No critiques o condenes cosas de las que no estás seguro. Habla siempre verdadera y constructivamente. Ten el valor de hablar sobre situaciones de injusticia, aun cuando hacerlo pueda amenazar tu propia seguridad.
No uses a la comunidad Budista para ganancia o provecho personal, ni transformes tu comunidad en un partido político. Una comunidad religiosa debe, sin embargo, tomar una actitud clara contra la opresión y la injusticia, y debe esforzarse por cambiar la situación sin engancharse en conflictos partidarios.
No vivas con una vocación que sea dañina para los humanos y la naturaleza. No inviertas en compañías que priven a los demás de su oportunidad de vivir. Elige una vocación que ayude a realizar tu
ideal de compasión.
No mates. No permitas que otros maten. Encuentra todos los medios posibles para proteger la vida y prevenir la guerra.
No poseas nada que debería pertenecer a los demás. Respeta la propiedad de los demás pero evita que los demás se enriquezcan con el sufrimiento humano o el sufrimiento de otros seres.
No maltrates a tu cuerpo. Aprende a manejarlo con respeto. No veas a tu cuerpo sólo como un instrumento. Preserva las energías vitales (sexual, respiración, espíritu) para la realización del Camino. La expresión sexual no debería ocurrir sin amor y compromiso. En las relaciones sexuales, sé conciente del sufrimiento futuro que pueda causarse. Para preservar la felicidad de los demás, respeta los derechos y compromisos de los demás. Sé plenamente conciente de la responsabilidad de traer nuevas vidas al mundo. Medita sobre el mundo al cual estás trayendo nuevos seres.

No creas que yo siento que sigo todos y cada uno de estos preceptos perfectamente. Sé que fallo de muchas maneras. Ninguno de nosotros puede cumplir plenamente cualquiera de ellos. Sin embargo, debo trabajar hacia una meta. Esta es mi meta. Ninguna palabra puede reemplazar a la práctica, sólo la práctica puede hacer a las palabras.

 

SEMILLAS DE CONSCIENCIA



Cuando miramos profundamente a una flor, podemos ver que está hecha de elementos no-flor , como el sol, la lluvia, el suelo, el compost, el aire y el tiempo. Si seguimos mirando profundamente, también nos daremos cuenta de que la flor está en camino de convertirse en compost. Si no percibimos esto, nos sorprenderemos cuando la flor comience a descomponerse.
Cuando miramos profundamente en el compost, vemos que también está en camino de convertirse en flor, y nos damos cuenta de que las flores y el compost “inter-son.” Se necesitan mutuamente. Un buen jardinero orgánico no subestima el compost, porque sabe cómo transformarlo en margaritas, rosas, y muchos otros tipos de flores.
Cuando miramos profundamente dentro de nosotros mismos, vemos las flores y la basura. Cada uno de nosotros tiene ira, odio, depresión, discriminación racial, y muchos otros tipos de basura, pero no hay necesidad de temerle. De la misma forma en que un jardinero sabe transformar el compost en flores, podemos aprender el arte de transformar la ira, la depresión y la discriminación racial en amor y comprensión.
Esto es obra de la meditación. Según la psicología budista, nuestra conciencia se divide en dos partes, como una casa de dos plantas. En la planta baja hay una sala de estar, y la llamamos “conciencia de la mente.” Por debajo de la planta baja, hay un sótano, y lo llamamos “almacén de la conciencia”
En ese almacén todo lo que hemos hecho siempre, experimentado, o percibido se almacena en forma de semilla, o película. El sótano es un archivo de todo tipo imaginable de películas almacenadas en una cinta de vídeo. Arriba, en la sala de estar, nos sentamos en una silla a ver éstas películas, de las que nos servimos desde el sótano.
Ciertas películas, tales como la ira, el miedo o la desesperación, parecen tener la capacidad de subir del almacén por sí mismas. Abren la puerta de la sala de estar y activan por sí mismas nuestro reproductor de vídeo, tanto si las elegimos o no. Cuando eso sucede, nos sentimos atrapados, y no tenemos más remedio que verlas. Afortunadamente, cada película tiene una longitud limitada, y cuando se ha terminado, regresa al almacén. Pero cada vez que es vista por nosotros, gana una mejor posición en el estante del archivo y sabemos que va a volver pronto.
En algún momento un estímulo desde fuera, como cuando alguien dice algo que hiere nuestros sentimientos, provoca la proyección de una película en la pantalla de nuestro televisor. Pasamos gran parte de nuestro tiempo viendo estas películas, y muchas de ellas nos están destruyendo.
Aprender a detenerlas es importante para nuestro bienestar.
Los textos tradicionales describen la conciencia como un campo, un terreno en el que cada tipo de semilla se puede sembrar ; semillas de sufrimiento, felicidad, alegría, tristeza, miedo, ira y esperanza .
Cuando una semilla se manifiesta en nuestra conciencia mental, siempre regresa al almacén mucho más fuerte. La calidad de nuestra vida depende de la calidad de las semillas en el almacén de la conciencia. Si manifestamos semillas de ira, tristeza y miedo en nuestra conciencia mental, las semillas de la alegría, la felicidad y la paz no podrán brotar y fortalecerse.
Practicar la atención plena significa reconocer cada semilla, que viene desde el almacén y regar las semillas más nutritivas siempre que sea posible, para ayudarlas a crecer más fuerte. En cada momento que nos damos cuenta de algo pacífico y hermoso, reguemos las semillas de paz y belleza , y hermosas flores florecerán en nuestra conciencia.
El tiempo que dedicamos a regar y cuidar determina la fuerza de esa semilla. Por ejemplo, si nos encontramos delante de un árbol, respiremos conscientemente, y disfrutemos de él durante cinco minutos. Semillas de felicidad se regarán en nosotros durante cinco minutos, y esas semillas crecerán más fuertes.
Durante los mismos cinco minutos, otras semillas, como las del miedo y el dolor, no son regadas. Tenemos que practicar de esta manera todos los días.
Cualquier semilla que se manifiesta en nuestra conciencia mental siempre vuelve a nuestro almacén de la consciencia fortificada. Si regamos nuestras semillas sanas con cuidado, podemos confiar en que nuestro almacén de consciencia se producirá trabajo de sanación.
Thich Nhat Hanh



http://comunidadconsciencia.ning.com/forum/topic/show?groupUrl=consciencia-zen&id=6536266%3ATopic%3A236960&xgs=1&xg_source=msg_share_topic